No, no eran Pablo Milanés acompañado de Silvio Rodríguez pero su trova sonaba mejor. Las cuerdas de las guitarras de Fernando Delgadillo y Alejandro Filio enamoraban los sentidos, especialmente al corazón, ya que canción tras canción, dejaba salir la emoción de un amor pasado, presente, joven, viejo, frustrado, consumado.

En punto de las horas 21 horas aparecieron estos grandes de la trova mexicana, seguidos de la ovación de una sala de conciertos repleta.

El primero en rasgar las cuerdas fue Fernando y minutos después Alejandro, con lo que comenzó, turno por turno, un duelo de canciones. Primero las clásicas de su amplio repertorio, luego las más actuales seguidas de las interpretaciones inéditas.

Bastaba cerrar los ojos para transportarse a las “Peñas”  de aquellos años 70¨s. Con igual romanticismo y mensaje, estos gigantes de la trova mexicana convirteron por varias horas en arena de lucha poética al Frontón Bucareli

Fernando Delgadillo y Alejandro Filio, cada uno por su cuenta, pero juntos en el mismo escenario presentaron en exclusiva su nuevo disco, haciendo de esta velada una cita ineludible para los amantes de la música y la poesía.

 Fernando Delgadillo, originario de la Ciudad de México, es conocido por su contribución significativa a la trova mexicana. Con una carrera que abarca más de tres décadas, Delgadillo ha cautivado a su audiencia con su estilo poético y melódico, convirtiéndose en un referente indiscutible de la música contemporánea en México.

Nacido en los albores del boom que estremeció a las juventudes latinoamericanas (1965) con la consolidación de la revolución cubana, Fernando Delgadillo ha logrado transcender fronteras, llevando su música a diversos países de América Latina y Europa, acumulando seguidores que valoran la profundidad emocional de sus composiciones. Sus álbumes, poco a poco, se convierten en música de colección, un estatus de culto, reflejando la evolución de su talento y la capacidad de su música para resonar con una audiencia diversa.

 Por otro lado, Alejandro Filio, nacido en Tampico, Tamaulipas, en 1954, es otro pilar fundamental de la trova. Con una trayectoria que supera las cuatro décadas, Filio ha dejado una marca imborrable en el género, reconocido por sus letras profundas y su habilidad para contar historias a través de sus canciones. Su estilo distintivo y su capacidad para conectar con el público lo han consolidado como un cantante de la talla de los grandes Pablo, Silvio, Vicente Feliú, Leo Brauer y Noel Nicola.

A lo largo de su carrera, Filio ha lanzado varios discos aclamados y ha compartido escenario con numerosos artistas de renombre, tanto a nivel nacional como internacional, pero esta mancuerna con Fernando Delgadillo, promete quedarse por largo tiempo, ya que, junto, han logrado una nueva comunicación musical, entre ellos y con su público.